jueves, 16 de febrero de 2023

ENTRENADOR PROFESIONAL DE FÚTBOL

El pasado mes de septiembre terminó para mí la temporada 2021/22. Los lectores futboleros saben que por mucho mundial que haya, todas las temporadas, contratos, patrocinios... en fúbol, terminan el 30 de junio, pero es que mi año fue largo, largo.

Y es que me embarqué en el Curso de Entrenador Profesional, conocido comúnmente como Nivel 3, cuyo proyecto final debíamos defenderlo a principios de septiembre, al mismo tiempo que seguía haciendo Betis en la Escuela, con un grupo de prebenjamines que me enamoraron desde el primer día, aunque esto es materia de otra entrada.

El año deportivo 2021/22. como decía, verano incluido, estuve aprendiendo de mano de profesionales de primera categoría en el Centro de Estudios, Desarrollo e Investigación del Fútbol Andaluz (CEDIFA), con un curso cargado de actividades prácticas, teóricas, tareas competenciales y exámenes.

Esas 16 asignaturas fueron duras y exigentes, pero directamente proporcionales al aprendizaje que fui adquiriendo con cada una de ellas, dándole una vuelta a este deporte tan popular y, a veces, tan desconocido para el aficionado. El fútbol fue desgranado en partes en este curso dirigido a futuros entrenadores profesionales, por parte de un profesorado experto que nos condujo a una inmersión en el deporte rey, las 24 horas del día y durante casi un año natural. Con la mente puesta en el balón y la ayuda de todos mis compañeros, afronté cada una las asignaturas con su contenido denso, su tarea competencial o trabajo, así como su correspondiente examen, con la ilusión de un niño y la certeza que merecería la pena el esfuerzo.


El 18 de septiembre de 2022 recibí en la plataforma MISQUAD el APTO de la defensa de mi proyecto final, basado, como no podía ser de otra forma, en mi club de origen, con lo que a falta de las prácticas, lograba cerrar este ciclo de mi formación iniciado allá por el 2016, cuando me paseaba por los campos de la provincia sevillana viendo disfrutar a mis niños.


De este modo, estrené mi carné de entrenador profesional en el Castilleja Club de Fútbol, gracias al director deportivo y amigo José Antonio Granja, que me dio la oportunidad de volver a mi casa 30 años después de mi último partido como jugador. Desgraciada o afortunadamente, no pude empezar la temporada con este fantástico grupo de chavales, porque el destino me tenía guardada una oferta en verdiblanco, que no pude rechazar.